La lucha permanente del ¡Branding personal y el populismo!
Aunque muchos no lo veamos como un potencial, queda claro que todas las personas somos una marca. La percepción de como queremos ser recordados en el ámbito personal y profesional se da, desde nuestra forma de expresernos hasta como vestimos en el día a día. El alcance y alta penetración de las redes sociales en la actualidad ha convertido a estos canales en una estrategia que no muchos saben aprovecharlo.
Pero ¿es suficiente con tan solo tener dominios propios en las redes sociales, para tener una marca personal? la respuesta es, NO. El expresar tu opinión, la definición de la imagen y uso de recursos armoniosos y profesionales al hacer una publicación en Facebook, Twitter, LinkedIn o Instagram, establece tu marca.
La marca personal o personal branding es un concepto que nace en el año 1997 de la mano del escritor y hombre de negocios Tom Peters. Considerado como uno de los gurús de la literatura empresarial, acuñó este término para dejar patente la importancia de dejar huella en la mente de una persona y a partir de esta fecha, varias celebridades si que han sabido sacarle provecho
Al 2022, se dice que este sería el negocio de mayor expansión si se sabe aprovecharla de forma profesional, y más si esta va linkeada a contenido de valor de empresas que reconocen la importancia de tener marcas con propósito. Por ello, el punto inicial y quizá el más importante para definir tu personal branding, es preguntarte, ¿cómo quieres ser recordado o buscado? En términos de estrategia digital, todo tiene un objetivo y este apenas será el punto del ovillo. Si has empezado al reves y publicas sin ningún propósito nunca lograrás ampliar tu red de contactos, dejar un mensaje fuerte y sólido, o peor aún, correras el riesgo de pasar desapercibido ante públicos que son de gran interés
En este punto, si has entendido el propósito y el alcance exponencial que tienen las redes sociales, entonces es momento de echar un ojo a tus cuentas y saber si estas cumplen con tu expectativa. Pero antes de hacerlo, es importante que recuerdes las diferencias del “branding vs el marketing” y al tratarse de una marca personal deberas evitar tropiezos en este camino. Si no lo tienes claro aquí esclaresemos las diferencias «El marketing se concentra en la forma en que la marca alcanza y se comunica con el mercado, mientras que el branding se centra en la definición de su esencia y filosofía a largo plazo.»
Una vez esclarecida estas inquietudes, debes conocer que la gente escucha recomendaciones de personas, no de empresas y esto representa un punto a tu favor. Para confirmarlo podrás acudir a sitios web en las que frente a una necesidad de un producto específico, saldrán personas a defender la reputación de la marca. Si no las hay entonces la confianza enfrentará tropiezos
Otro factor que refuerza la importancia de tener una marca personal fuerte es el constante cambio de algoritmos en las redes sociales, que siempre limitan el alcance de páginas de empresas para favorecer la interacción entre los perfiles personales. Por eso, el marketing de influencia ya es una realidad, y está muy relacionado con el branding.
En la actualidad, existe una idea, y hasta una presión, de que convertirse en un influyente es sinónimo de éxito en la vida. Principalmente en la era de los medios sociales, con varios ejemplos de personas que viven del número de seguidores que conquistaron. Pero debes entender que la visibilidad de un influencer no necesariamente traerá los resultados que buscas. Y, más importante aún, entiende que existe una enorme diferencia entre influencia y popularidad:
«La popularidad es cuando la gustas a la gente. Influencia es cuando se detienen para oír lo que tienes para decir.»Es posible conquistar los dos, pero el foco del personal branding es la influencia y la popularidad es solo un posible extra. Para conseguir el proposito no olvides el storytelling, donde no tan solo deberas contar la historia, sino vivirla y transmitirla y por útlimo, escoger asertivamente el canal donde esté o desees crear tu comunidad.
Una vez hecha esta radiografía, será tú quien decides que quieres ser. ¿popular o influyente?